La clasificación de los peces se basa en diferentes características que les permiten ser agrupados en diferentes categorías. Los peces son animales vertebrados acuáticos que se caracterizan por tener un cuerpo alargado, cubierto de escamas y con branquias que les permiten respirar bajo el agua.

Existen distintas categorías de clasificación de los peces, una de ellas es la clasificación por tipo de esqueleto. Hay peces con esqueleto óseo y peces con esqueleto cartilaginoso. Los peces con esqueleto óseo son aquellos que tienen un esqueleto duro compuesto por huesos, como el salmón o el pez payaso. Por otro lado, los peces con esqueleto cartilaginoso son aquellos que tienen un esqueleto flexible compuesto por cartílago, como los tiburones y las rayas.

Otra clasificación de los peces se realiza teniendo en cuenta su forma y adaptaciones morfológicas. Hay peces planos, como las platijas, que se camuflan con el fondo marino, y peces fusiformes, como los atunes, que son rápidos y aerodinámicos. Además, hay peces con adaptaciones específicas para vivir en diferentes ambientes acuáticos, como los peces de agua dulce y los peces de agua salada.

También se puede clasificar a los peces según su alimentación. Hay peces carnívoros, que se alimentan de otros peces o animales acuáticos, y peces herbívoros, que se alimentan de plantas acuáticas y algas. Además, existen peces omnívoros que pueden consumir tanto carne como plantas.

En conclusión, la clasificación de los peces se realiza en base a diferentes características como el tipo de esqueleto, la forma y adaptaciones morfológicas, y la alimentación. Esta clasificación permite entender mejor la diversidad y la complejidad de estos fascinantes animales acuáticos.